En diciembre de 2017, Sweet Leaf, la cadena de dispensarios más grande de Colorado fue asaltada por el Departamento de Policía de Denver luego de una investigación secreta de un año de duración relacionada con el negocio
Los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley cerraron todas las áreas porque la tienda estaba vendiendo más de la medida “legal” de cannabis a un cliente al mismo tiempo, lo que de otro modo se podría denominar bucle. Dos años después de la redada, el caso llegó recientemente a una etapa crítica: los propietarios de Sweet Leaf, Matthew Aiken, Christian Johnson y Anthony Sauro confesaron haber violado la Ley de Control del Crimen Organizado de Colorado (COCCA), una ley basada en el chantaje y la dispersión ilegal del cannabis.
Según un acuerdo de declaración de culpabilidad con el Fiscal de Distrito de Denver, los delincuentes cumplirán un año en la cárcel, se enfrentarán a un año de libertad condicional y un año de libertad condicional por los cargos bajo COCCA. Asimismo, tendrán un delito en sus registros por la distribución de cannabis. Además, como indican los informes, Aiken, Johnson y Sauro deberán devolver los activos de sus diferentes organizaciones, Dynamic Growth LLC y AJS Holdings. Además, están obligados a pagar multas de $ 125,000 cada una por no presentar declaraciones de impuestos y participar en el crimen organizado.
El vicepresidente anterior de Sweet Leaf, Nichole West, dijo que el juicio para los delincuentes es horrible. West cumplió 30 días en prisión en diciembre pasado junto con el gerente de operaciones minoristas Ashley Goldstein, ya que fueron declarados culpables por cargos ilegales de distribución de cannabis. Ella dijo que los delincuentes son hombres serios que se preocupan por su grupo y su red. También cree que esto puede servir como un punto de inflexión para toda la industria del cannabis para luchar por la legalización federal y que, en cualquier caso, los expertos de cannabis de Colorado solicitan un cambio en las sanciones que abarcan las «transacciones» en el estado de Colorado.
La historia de Sweet Leaf es profunda por varias razones, entre las cuales se encuentra el hecho de que Sweet Leaf es el primer titular legal legal en los registros. Otra confirmación es que la hierba sigue siendo ilegal. Sin embargo, la historia narra una historia extraña de las complejidades de componer y comprender una nueva ley, y la mezcla de una industria del mercado que antes era una actividad pirata en una escena legalmente reconocida. Además, ilustra lo que ocurre cuando las organizaciones de cannabis son investigadas por la policía.
Antes de la incursión de Sweet Leaf, la ley de cannabis en Colorado explicaba que una «Tienda minorista de marihuana y sus trabajadores no tienen permitido vender más de una onza de flor de marihuana minorista en Concentrado de marihuana minorista o Producto minorista de marihuana durante una sola transacción de venta a un consumidor. ”
Se informa que la tienda ha ofrecido varias onzas a los clientes dentro de un día determinado en diferentes transacciones en el año 2016-2017. De acuerdo con el énfasis anterior de la ley, hacer esto es técnicamente legal, y es probablemente como varios dispensarios también estaban realizando transacciones en Colorado.
Según los informes, la División de Control de la Marihuana (MED) de Colorado transmitió un memorando en mayo de 2017, lo que explica que solo una onza de marihuana puede venderse a una persona en una sola transacción en un día determinado. West y la anterior oficial de cumplimiento del MED Renee Rayton (quien fue procesada por supuestamente participar en una red de tráfico de marihuana no relacionada) discuten la perplejidad de la ley. Según Rayton, realizar más de una transacción es ilegal.
Debido a los ataques y arrestos de Sweet Leaf en los que fueron capturados 18 prestamistas, la ley de cannabis de Colorado se actualizó el 1 de enero de 2018, para explicar explícitamente la transacción. En la actualidad, aclara que una «Tienda minorista de marihuana y sus trabajadores no pueden realizar transacciones de más de una onza de flor minorista de marihuana o su sustituto en Concentrado de marihuana minorista o Producto minorista de marihuana en una sola transacción a un consumidor. «Una sola transacción incorpora varios acuerdos a un comprador similar en medio de un día hábil similar en el que el representante de Retail Marijuana Store sabe o debería darse cuenta de que tal movimiento daría lugar a que el consumidor tenga más de una onza de hierba».
No se consideró ninguna indulgencia en los propietarios del dispensario. Recientemente, los investigadores dijeron que Aiken, Johnson y Sauro se dieron cuenta de que los trabajadores de Sweet Leaf permitían a los clientes hacer varias compras el mismo día, superando el límite de propiedad de una onza del estado. Según los informes locales, los agentes creen que Sweet Leaf estaba a cargo de prácticamente 2,5 toneladas de cannabis ilegal que ingresaba al mercado negro.
Como lo indicó un anuncio de Denver DA Beth McCann, un ciudadano alertó a los agentes de la ley que observaban a personas similares haciendo muchas compras en un dispensario de Sweet Leaf en un día.
¿El veredicto? La negación del cannabis todavía está viva y floreciendo, incluso en los estados donde se implementan las leyes legales sobre el cannabis. Como resultado, Aiken, Johnson y Sauro tienen prohibido ingresar a la industria del cannabis de Colorado durante los siguientes 15 años.
