Optimizando el cultivo de marihuana autofloreciente en interior

Tiempo necesario para el cultivo de cannabis en interior

El tiempo del cultivo interior de cannabis para obtener un buen resultado depende de varios factores

Vamos a analizar el tiempo de cultivo interior de cannabis para conseguir un correcto desarrollo y forma de nuestra planta, que es lo que marca la diferencia entre un espécimen productivo y de gran calidad y una mata sin casi follaje ni producción. Vamos a hablar del tiempo de desarrollo normal y las distintas fases por las que pasa la marihuana.

¿Cuánto tarda en germinar, crecer y florecer el cannabis? ¿Hay algo que yo pueda hacer para que la planta florezca antes? ¿Puedo acelerar el crecimiento? ¿Cuál es la planta de crecimiento más rápido y de mayor producción?

Como hacer semillas de cannabis feminizadas

Optimizando el cultivo de marihuana autofloreciente en interior

Germinación

Para saber el tiempo de cultivo interior de cannabis vamos a considerar esta fase como el tiempo trascurrido desde que la semilla germina hasta convertirse en plántula. Si partimos de esquejes consideraremos este tiempo como el plazo trascurrido entre el tiempo de clonación y enraizamiento del mismo.

Hay diferentes técnicas para germinación de las semillas de cannabis. Quizás la más usada y recomendada es la que se sirve de una servilleta o papel húmedo en la que pondremos la semilla. Pero hay muchos cultivadores que las germinan con otras técnicas más arriesgadas, como por ejemplo poner la semilla sobre algodón húmedo, directamente en tierra o disco jiffy o en agua. También hay que decir que cuando compramos semillas de calidad, la germinación siempre estará casi garantizada.

Algunos cultivadores utilizan estimuladores de germinación que favorecen el metabolismo inicial de la semilla y reblandecen su corteza, haciendo que el tiempo de germinación de la semilla se reduzca mucho.

Si no utilizamos estos estimuladores, el tiempo es relativo y dependerá de numerosos factores como el tipo de variedad, la calidad de la semilla, la antigüedad de la semilla, la fertilidad de la misma, o la forma en que se ha conservado. El tiempo que tarda en brotar la plántula suele rondar las 24-72 horas, aunque en muchas ocasiones pueden llegar a tardar hasta 5 o incluso 10-15 días. En cualquier caso, hay que tener en cuenta las condiciones del agua y humedad, la oxigenación y, sobre todo, que la temperatura durante esta fase oscile entre los 21-24ºC

Crecimiento

Cuando se trata del tiempo de cultivo interior del cannabis, este periodo es conocido como “fase vegetativa”. Es la fase central en el desarrollo de una planta de cannabis y probablemente la más importante. Después de que tenemos nuestra plántula y la trasplantamos a su lugar definitivo, comenzará la fase de crecimiento. Durante esta fase la planta dará un estirón y desarrollará su morfología y el tamaño necesarios para pasar a la siguiente fase: la floración.

El fotoperiodo en esta fase será mayor que en la fase de floración. Lo normal es proporcionar a la planta dieciocho horas de luz por seis de oscuridad al día. Un correcto equilibrio entre luz y oscuridad será clave para su perfecto desarrollo. La luz es muy importante para que la planta pueda hacer la fotosíntesis, pero además serán fundamentales esas horas de oscuridad absoluta, ya que es cuando se produce el intercambio de gases esencial para el metabolismo de las células vegetales.

Esta fase durará más o menos tiempo, dependiendo del tipo de semilla, la variedad y/o el tipo de cultivo. Las variedades autoflorecientes son más rápidas que las feminizadas y al mismo tiempo, los cultivos de interior son normalmente más rápidos que los exteriores. Por otra parte, usar una fuente de luz de mayor potencia, implica un crecimiento más acelerado que con luces de menos potencia.

Cuando se trata del tiempo de cultivo interior de cannabis, dar un estándar del tiempo que dura la fase de crecimiento es imposible ya que depende de varios factores ambientales, vegetales y externos (protocolos de fertilización y experiencia del cultivador). Normalmente durará entre 3 o 4 semanas (21 a 25 días) para autoflorecientes y alrededor de 6 u 8 semanas en el caso de semillas feminizadas.

Aunque las semillas regulares y feminizadas cultivadas en exterior tardan meses en concluir sus ciclos de vida, en un cultivo interior podremos falsear las condiciones climáticas y ambientales para forzar el crecimiento y reducir su ciclo normal.

Cuando cultivamos cannabis en interior, tan pronto veamos que la planta tiene un tamaño adecuado y comienza a mostrar sus primeras inflorescencias, podremos cambiar el fotoperiodo para comenzar el ciclo de floración.

Floración

Cuando se trata del tiempo de cultivo interior de cannabis, la fase de floración es el último de los periodos de desarrollo de una planta. Su comienzo dependerá, ya no solo del tiempo de crecimiento que le demos a la planta, sino además de que la planta tenga las características adecuadas para sostener los cogollos que desarrollará. Por ejemplo, aunque haya pasado un mes desde la germinación de la semilla, si la planta es demasiado pequeña, deberemos prolongar más la fase de crecimiento.

Las variedades autoflorecientes marcarán su floración sin que nosotros intervengamos. Las semillas feminizadas y las regulares dependen de la mano del cultivador en los cultivos de interior. Tendremos que cambiar el fotoperiodo a doce horas de luz y oscuridad por día, para inducir a la planta a que inicie la fase de floración.

Si antes decíamos que era relativo el tiempo del cultivo en interior que necesita la planta en su fase de crecimiento, es aún más relativo en su fase de floración. Lo importante a la hora de decidir cuándo acaba la floración y empezamos a lavar las raíces y finalmente cortamos la planta, es fijarnos en el desarrollo de los cogollos. Porque el tiempo que nos marca el banco de semillas es orientativo. Lo esencial es que observemos que los cogollos van engordando hasta cubrir o verse enterrados en él la mayoría de los pistilos.

Una vez desarrollados los cogollos, el tiempo de cosecha lo determinará la maduración y oxidación progresiva de los pistilos y tricomas, que adquieren ese bonito color ámbar. Es aconsejable tener una lupa de 50 aumentos para observar los tricomas. Cuando aproximadamente el 15% de estos tengan un color ámbar opaco será el momento de la cosecha. Los tricomas serán antes del mismo color pero transparentes. Es necesario que un 15% de los tricomas se vuelvan opacos.

En interior, las autoflorecientes normalmente completarán su desarrollo final en unas ocho semanas y las variedades feminizadas podrán tardar más en función del crecimiento que le hayamos dado, aunque lo más normal es alrededor de 10-12 semanas en adelante.

Secado-curado

No es una fase de la vida del cannabis. Pero es un proceso que nos llevará un tiempo y que será igual de determinante que los anteriores para conseguir una producción de calidad tanto en sabor, en olor, en efecto y en potencia. Hay que diferenciar entre secado y curado. El secado es el primero de los tratamientos al que debemos someter nuestras plantas tras la cosecha.

El secado consiste en colocar las flores cortadas y manicuradas en un lugar oscuro, fresco y seco todos. Lo más aconsejable es colocarlas sobre una red de secado (recordad limpiar con riegos abundantes las raíces al final del cultivo). Debes ir rotando día a día los cogollos de la malla o red, para así, evitar su deformidad y asentamiento sobre el mismo lado.

El secado puede durar, dependiendo del lugar, entre dos a cuatro semanas. La señal de identidad de un cogollo bien secado es la de poder doblar su tallo, pudiendo escuchar su chasquido pero sin llegar a partirse, solo doblarse.

Curación

La curación consiste en retirar y guardar todos los cogollos en un recipiente y dejarlo reposar con una aireación periódica. La curación puede hacerse en distintos recipientes, ya sean de plástico, cristal o madera. El recipiente de madera es más rápido y el recipiente de cristal es el mejor para evitar contaminación y malos olores. El recipiente en que guardemos la cosecha deberá mantenerse de igual forma en un lugar oscuro, fresco y seco. Lo único que tendremos que hacer es abrir diariamente el recipiente unos cinco minutos para que la poca humedad que vaya desprendiendo el tallo se pierda progresivamente.

Este proceso suele durar entre 2 y 6 semanas. El punto clave de curación será aquel en que el cogollo cruja cuando lo apretamos levemente y el tallo se parta cuando lo doblamos. Además, las flores pierden su color verde intenso y deja de oler tanto a hierba ya que el olor a hierba significa que la flor todavía conserva demasiada clorofila.

Conclusión sobre el tiempo necesario para el cultivo de cannabis en interior

Una planta de marihuana cultivada en interior tarda en desarrollarse completamente alrededor de tres meses en el caso de las autoflorecientes y entre cuatro y cinco meses en el caso de las feminizadas, según el tipo de cultivo y cuidados. Estamos hablando del tiempo trascurrido entre la germinación de la semilla y el momento en que finalmente podemos fumar la marihuana tras el proceso de secado y curación.

Dependiendo de nuestra pericia en el cultivo y los cuidados que demos a la planta, así como de la variedad que escojamos, serán mayores o menores los tiempos de cada fase y por lo tanto, el tiempo del cultivo interior del cannabis. De la misma forma que el cannabis tardará menos en desarrollarse en cultivos interiores que en exteriores.