Un grupo de miembros de la Iglesia Internacional del Cannabis se enfrentan a una acusación por consumo de marihuana en el interior de una Iglesia
Steve Berke, cofundador de The International Church of Cannabis está luchando contra una acusación menor de 2017 de “uso público y abierto” del cannabis. Él estará en la corte de Denver el próximamente.
La multa máxima en este caso es de 300 dólares. Sin embargo, los expertos en cannabis están observando este caso desde un punto de vista diferente que ha estado confundiendo a los fumadores de marihuana desde que se legalizó el cannabis. ¿Qué se considera consumo “abierto y público” de marihuana?
Este caso ha estado generado tantos problemas jurídicos, que se produjo una situación en la que los fiscales no fueron capaces de sentar a los 6 miembros de un jurado.
Todo comenzó el 20 de abril de 2017, cuando la policía de Denver irrumpió en una celebración privada de la iglesia durante la cual algunos de los más de 200 asistentes fumaban marihuana en lugares especiales para el consumo.
La policía de Denver emitió citaciones para Berke, Lee Molloy y Briley Hale: los tres fundadores de la Iglesia. Están acusados de consumo público y abierto de cannabis y de violar el Acta de Limpieza Interior de Colorado.
La Iglesia Internacional del Cannabis dice que la marihuana es el sacramento principal y que los miembros reciben servicios una vez por semana. Los miembros se llaman a sí mismos «elevacionistas» y consumen la «flor sagrada» para mostrar la mejor versión de los seres humanos y enriquecer a su gente con los frutos de la creatividad.
Ya en marzo de 2018, un juez declaró que el juicio era nulo porque los fiscales no podían obtener un jurado de seis personas. Los posibles miembros del jurado rechazaron abiertamente el juicio y cuestionaron la teoría del caso del abogado de la ciudad, Rebekah Watada. Básicamente, cuestionaron la razón por la cual sus impuestos tenían que gastarse en casos menores como este. Otro miembro potencial del jurado preguntó cómo era posible que siete policías estuvieran en la lista de testigos por un cargo menor de marihuana. Todos pensaron que era absurdo gastar tanto dinero y recursos para este caso tan poco importante.
Steve Berke dijo que pensaba que era una increíble pérdida de tiempo y dinero. Se sorprendió bastante de que la ciudad gaste dinero de los contribuyentes para procesarlos.
La ciudad de Denver le ofreció un trato según el cual podría alegar la infracción civil y pagar «su crimen» con servicios comunitarios. Pero él rechazó la propuesta.
Espera ser absuelto porque, entre otras razones, no fumó marihuana ya que era el anfitrión del evento.
La oficina del abogado de la ciudad se negó a comentar al respecto. Pero Berke está considerando una demanda contra la ciudad porque perdió mucho dinero desde que ocurrió la redada policial. La Iglesia, desde hace 114 años acoge bodas y eventos privados.