Tras 20 minutos de deliberación del jurado, un juez decide encarcelar a un enfermo de 60 años por cultivar cannabis en Missouri
Encarcelan a enfermo por cultivar marihuana medicinal. Antes de la condena por delito grave de posesión de marihuana a principios de este año, Steven Sutherland estaba muy enfermo. Le habían diagnosticado una enfermedad cardíaca crónica, diabetes tipo 2 y le suministraban oxígeno para tratar su apnea del sueño. Shuterland, de 60 años, decidió medicarse con cannabis que él mismo cultivaba. Pero la policía de Missouri le arrestó y el juez ordenó encarcelarle por delito grave de Clase B por cultivar cannabis.
Pero la salud de Sutherland ahora depende del sistema penitenciario de Missouri. En abril, después de años de demoras, un jurado tardó menos de veinte minutos en condenar a Sutherland por delitos graves por posesión y cultivo de marihuana y parafernalia de drogas. En Missouri, el delito de posesión de cannabis es equiparable al delito de cultivo de la hierba. Un mes después, un juez lo condenó a diez años de cárcel por cultivar marihuana, lo cual es un delito grave en el estado de Missouri.
Sutherland tenía antecedentes penales previos: una condena por delito grave en 1996 por posesión de marihuana. Para el tribunal, el cargo por el delito cometido hacía 20 años le convierte en un «delincuente reincidente de drogas», lo cual cambia el delito por posesión de drogas por un delito grave de Clase B, que es equiparable a crímenes violentos como robo a mano armada o ciertos asaltos sexuales.
El abogado defensor de Shutherland dice que nunca antes había visto un trato igual en sus nueve años de ejercicio de la profesión. Todo comenzó en enero de 2015, cuando el Departamento del Sheriff del Condado de Franklin irrumpió en la casa de Sutherland. En el sótano los agentes incautaron alrededor de 110 gramos de marihuana y 21 plantas de cannabis que el enfermo cultivaba. En una entrevista telefónica del Centro de Diagnóstico y Recepción de Fulton, Sutherland dijo que cuando los policías aparecieron en su casa él estaba fumando una pipa y tomando una taza de café. Un policía le agarró de la garganta y le arrojó al suelo.
Sutherland explica que se ha automedicado con cannabis que él mismo cultiva desde hace décadas y que tenía una tarjeta de marihuana medicinal de California. También explica que había estado comprando la marihuana por correo desde California hasta hacía unos años. Pero llegó un momento en el que no tenía dinero para seguir comprando marihuana y decidió cultivarla él mismo. Sutherland insiste en que solo estaba cultivando cannabis para su propio uso medicinal y que nunca imaginó que acabaría en la cárcel por ello.
El caso se prolongó durante años debido a la mala salud de Sutherland. Tras perder varias fechas en la corte debido a visitas al hospital, el nuevo Fiscal del Condado de Franklin, Matthew Becker, se hizo cargo del caso en 2019. En esa fecha los votantes de Missouri ya habían legalizado la marihuana medicinal. El abogado defensor de Sutherland, argumentó en una moción previa a la sentencia que la reforma nacional de las leyes de cannabis y los propios tribunales estatales, que sentenciaron a más de la mitad de todos los casos de posesión de drogas a libertad condicional, no a la cárcel, aconsejaron el perdón en el caso de Sutherland, pero el juez decidió encarcelarle por el delito grave de Clase B que es cultivar cannabis.
Huckeby , el abogado de Sutherland escribió en su moción que el pensamiento de ciudadanos en Missouri está indiscutiblemente alejado del castigo penal por marihuana. Huckeby escribió que la sentencia máxima de 15 años de cárcel por cultivar cannabis que enfrentaba este enfermo era la misma que se les daba a los condenados por homicidio voluntario o violación en segundo grado. También insistió en que no había indicios de que Sutherland, que era un enfermo de 60 años, cultivase cannabis por motivos diferentes a la automedicación. La documentación de los médicos de Sutherland describió un cuadro de numerosas afecciones médicas graves, incluidos trastornos cerebrales descritos como probablemente progresivos y que afectan la capacidad cognitiva. Las enfermedades de Sutherland han requerido la atención de un cardiólogo y neurólogo, así como medicamentos crónicos que requieren mantenimiento y vigilancia a largo plazo.
Posteriormente pero antes de la sentencia de junio, se incluyó en la moción del abogado la información de un neurólogo afiliado al Mercy Hospital quien reveló que había estado tratando a Sutherland por convulsiones desde 2017 y que le había recetado medicamentos para convulsiones múltiples sin mucho éxito. El médico añadió que él creía que la marihuana era de ayuda con sus convulsiones. Pero el Fiscal del tribunal solo se fijó en la cantidad de marihuana que el enfermo cultivaba. Matthew Houston, el fiscal asistente del condado de Franklin, dijo que la cárcel era el lugar donde se merecía estar Shuterland ya que aunque estuviese enfermo, había cultivado cannabis para más que unos pocos porros.
Lo cierto es que la salud de Sutherland está al límite. Se ha quejado de que los funcionarios de prisión le habían confiscado un componente clave para su máquina de oxígeno, que era esencial para seguir respirando por las noches. Posteriormente, los médicos de la cárcel le sometieron a una alimentación constante de oxígeno mediante un tubo conectado a la nariz de Sutherland. Pero esto implica que tiene que soportar una combinación de tubo de oxígeno y máscara de CPAP que resulta muy incómodo y no le permite dormir. El Fiscal señaló que aunque Sutherland merece atención médica adecuada, fue el juez, Michael Wright, quien decidió condenar al Sutherland a prisión por cultivar cannabis en lugar de libertad condicional.
Matthew Houston, el fiscal asistente del condado de Franklin, recomendó al juez que el acusado merecía una sentencia de no menos de doce años de cárcel. Houston dijo sobre el estado de salud de Sutherland que no sabía si se había tenido en cuenta para dictaminar la sentencia. Pero Houston cree que las circunstancias del uso de marihuana de Sutherland tuvieron mucho que ver con la forma en que se desarrolló el caso, así como con el hecho de que Sutherland fue arrestado con armas en su casa. Sutherland ya había sido castigado por posesión de marihuana hacía años. Por lo tanto, al tener antecedentes penales no le está permitido poseer armas de fuego. En 2015, los fiscales presentaron cargos por otros delitos graves contra él que también conllevaban décadas de prisión potencial. Se programó un juicio para octubre de 2019.
Pero los fiscales retiraron los cargos por delitos graves pendientes, y a cambio este enfermo acordó retirar su apelación de la condena de cárcel por cultivar cannabis. Sin apelación no es posible obtener una libertad condicional mientras se juzga la apelación. Como norma, los reclusos deben cumplir alrededor de 1 tercio de su condena antes de ser elegibles para libertad condicional. Sutherland se queja de que su situación se ha convertido en una pesadilla.